El contexto económico adverso que tuvo durante este año, el consumo masivo logró hundirlo en una severa crisis de la que lentamente atisba a recuperarse, según algunos indicios que surgen de las consultoras. Si bien, estas señales son incipientes, podrían estar marcando un cambio en la tendencia. Por ejemplo, la consultora Scentia, que releva todos los canales de venta, detectó una leve desaceleración respecto de la caída que habían tenido las ventas de los supermercados y autoservicios en septiembre. Así, en octubre, las ventas registraron una caída del 20,4% y el acumulado del año llega a una merma del 12,8%.
En septiembre, se había registrado la caída más fuerte del año que llegó al 22,3%. “La situación interanual mantiene una tendencia dura por la caída, sin embargo, es necesario poner en contexto dado que la comparación es sobre una base construida con acciones de tinte electoral que todos conocemos”, advierte el titular de la consultora Osvaldo del Rio.
Según el analista un dato muy consultado por diferentes sectores es lo que sucedió con las ventas respecto del mes anterior. “Si bien no es un indicador monitoreado por cuestiones estacionales, excepcionalmente lo estamos siguiendo y podemos decir que desde abril se observa una situación de estabilidad en las ventas y para tener una mirada más certera, sucede lo mismo en la venta promedio diaria”, señaló.
Por otro lado, el comportamiento de las ventas comparadas con el mismo mes de 2023 resultó negativo para todas las canastas, también en el acumulado anual. Los grupos de productos que tuvieron las caídas más fuertes en octubre, fueron higiene y tocador (25,8%) y los impulsivos, como snacks y golosinas, que se desplomaron 29,1%.
Los vaivenes de los volúmenes vendidos en los supermercados y comercios de cercanía se enmarcan en un precio promedio ponderado que viene en descenso: se ubica en menos de 200%, alineado con el Indice de Precios al Consumidor (IPC) que informó el INDEC el martes y mostró una suba del 193% en forma interanual.
Otros datos también coinciden con la desaceleración de la caída que vienen teniendo los comercios a partir de la drástica perdida del poder adquisitivo de los consumidores durante este año. Sucede que, si bien los salarios -formales, al menos- están recuperándose en los últimos seis meses- aún no logran compensar la importante caída que arrastran desde diciembre, cuando la inflación tocó un techo del 25,5%. Además, los gastos en el presupuesto familiar también están siendo reasignados a los servicios, donde los aumentos de precios vienen superando a aquellos de los bienes como los alimentos y bebidas.
Otros datos coinciden con la desaceleración de la caida. Por caso, la medición de Scanntech en autoservicios marcó un retroceso de 10,3% interanualmente (octubre 2023 vs octubre 2024) y un avance de 8,3 % respecto de septiembre de 2024.
«El consumo masivo comienza a crecer en la medición desestacionalizada frente al mes anterior. Lo que observamos es que hay un crecimiento moderado de las ventas en pequeños almacenes y despensas y una caída interanual en Supermercados e Hipermercados con amplios stocks en almacenes y depósitos aún por parte de las grandes empresas de producción industrial de alimentos, señaló Damián Di Pace Director de la Consultora Focus Market. El analista recordó ademas que para el mismo mes del 2023, el consumidor había hecho un sobre stock muy importante previo a las elecciones nacionales».
También la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), publicó datos de crecimiento de las ventas minoristas de pymes por un total del 2,9%, con un incremento del 5,8% en el rubro de alimentos y bebidas. Y, en la misma línea, la plataforma Consolido de Nextbyn, que monitorea las ventas y stocks en más de 350.000 negocios de cercanía volvió a detectar -durante el mes de octubre- un crecimiento en el consumo en algunas categorías como los productos refrigerados y las bebidas con y sin alcohol.