Diez días después de la sorpresiva eliminación de Inter Miami en los octavos de final de la MLS, Gerardo Martino presentó la renuncia por “razones personales”, según informó el periodista Tom Bogert, a la espera de la confirmación oficial del club. La franquicia solo informó que el entrenador rosarino y Jorge Mas, principal accionista del club, darán una conferencia de prensa el viernes.
La noticia encuentra a Lionel Messi en Buenos Aires con el seleccionado argentino. El Tata había asumido a principios de julio de 2023, en sustitución de Phil Neville, quince días antes de que Leo decidiera cerrar su carrera en el fútbol europeo, emigrando de Paris Saint Germain, para comenzar una nueva aventura. David Beckham, copropietario de Inter Miami, le había dado una calurosa bienvenida: “Tata es una figura muy respetada en nuestro deporte, su trayectoria habla por sí misma. Estamos seguros de que sus logros en el juego y su experiencia como primer entrenador inspirarán a nuestro equipo y entusiasmarán a nuestros aficionados. Estamos deseando ver el impacto que tendrá dentro y fuera del campo”. Mas había añadido: “Tata ha entrenado al más alto nivel y creemos que esa experiencia nos beneficiará enormemente en nuestro objetivo de competir por los títulos”.
El comienzo fue auspicioso, los buenos resultados no tardaron en llegar. En el segundo semestre del año pasado, Inter Miami obtuvo la Leagues Cup, título internacional -participan equipos estadounidenses y mexicanos-, el primero en la historia del club. La dinámica cambió en 2024.
La temprana eliminación ante Atlanta United en la MLS fue una decepción porque Inter Miami había sido el mejor equipo en la etapa regular, lo cual le valió el título de Supporter’s Shield 2024, que fue muy festejado por el plantel en el vestuario. En esos días, Inter recibió la confirmación de la FIFA de que será uno de los participantes del Mundial de Clubes 2025.
Martino se aleja con un balance de 38 victorias, 13 empates y 16 derrotas, con 145 goles a favor y 100 recibidos. Tras la dura marginación frente a Atlanta United -franquicia con la que Martino fue campeón de la Copa MLS en 2018-, el DT argentino había hecho el siguiente balance: “Si uno piensa en dónde estábamos en noviembre pasado, evidentemente hay progreso en el club, no sólo en el equipo. Pero si uno considera las expectativas para los playoffs, evidentemente nos hemos quedado demasiado cortos”. Además, este año Miami cayó ante Monterrey en los cuartos de final de la Copa de Campeones de la Concacaf y frente a Columbus Crew en los octavos de la Leagues Cup.
La rápida despedida en la MLS fue un impacto porque Inter había sido ampliamente superior a todos en la etapa regular. Finalizó con 74 puntos -récord en la competencia-, ocho más que su escolta y 10 sobre el puntero de la otra conferencia.
Esta era la tercera vez que Martino dirigió a Messi, tras hacerlo en el seleccionado argentino y Barcelona. Durante la campaña en la MLS, Messi convirtió 21 goles en 22 partidos. Quedó al margen en 10 cotejos por la lesión en un tobillo que sufrió en la final de la Copa América.
Si bien se desconocen las causas que llevaron a Martino a presentar la dimisión, tras el último cotejo se mostró apesadumbrado: “Estamos tristes, como hay que estar cuando había tantas expectativas y el equipo no puede cumplirlas. En esta última parte del año nos acostumbramos a lograr los objetivos planteados, pero no pudimos conseguir el más importante. Solo agradecimiento y disculpas por no haber podido lograr los objetivos que todos teníamos en la cabeza, tanto los de ellos como los de nosotros”.
Inter, además de Martino y Messi, tiene una amplia colonia argentina en el plantel: Oscar Ustari, Tomás Avilés, Marcelo Weigandt, Nicolás Freire, Franco Negri, Federico Redondo y Facundo Farías. El Tata se había reencontrado en Inter con dos futbolistas que tuvo a su cargo en Barcelona: Jordi Alba y Sergio Busquets.
De 61 años, Martino antes había dirigido al seleccionado de México, eliminado en la etapa de grupos del Mundial 2022, donde cayó 2-0 ante la Argentina. México había alcanzado al menos los octavos de final en los siete mundiales anteriores. Por la floja performance, Tata recibió muchas críticas de la prensa y afición mexicana.
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