La asociación sin ánimo de lucro SOS Desaparecidos presentará una querella -por la vía penal- y ante la Audiencia Nacional contra los ayuntamientos, el Consell y el Gobierno de España por la gestión de la riada del 29 de octubre, una acción a la que ya se han adherido una treintena de familias aunque, apuntan desde la organización, esa cifra crece cada día. Así lo asegura el presidente de SOS Desaparecidos, Joaquín Amills, que denuncia la «poca catadura mora» de las tres administraciones, plantea una lucha «de David contra Goliat» y advierte de que, en el relato bíblico, «David ganó» y ellos pretenden hacerlo.
«Lo primero es no caer en el error en el que nos quieren hacer caer: la DANA no mató a nadie, lo hizo la riada» , destaca Amills, que señala la responsabilidad de quien «no avisó a la población, no tomó las medidas preventivas que ya estaban legisladas y que son de obligado cumplimiento». Por eso, considera que fallaron las tres administraciones y se proponen ir judicialmente contra ellas con la colaboración de las familias. Primero, lo harán por la vía penal, y ahora trabajan en la parte técnica y documental de esta demanda, y después por la vía administrativa. Sobre qué delitos cree que cometieron las administraciones, apunta, aunque no exhaustivamente, «a la omisión del deber, a la negligencia, y a mucho más».
«No hay que inventar nada»
Asegura Amills que, en la gestión de Emergencias, «no hay que inventar nada». «Solo hay que seguir los protocolos, lo que marca la ley y lo que dicen los técnicos», afirma. En este sentido, recalca que los técnicos «ya sabían que venía una dana 48 horas antes» y las primeras comunicaciones sobre la emergencia «llegaron teóricamente a todas las partes encargadas de la gestión de la emergencia en la zona donde había un peligro». «¿Cómo puede ser que, durante todo el día, hasta las 20.11 de la noche, no se avisara?», se ha preguntado Amills.
«A las seis y las siete de la tarde, la gente estaba ya muriendo, había bajado a los garajes porque no le dijeron que no bajara, había salido a la calle porque no le dijeron que no saliera o se quedaron en sus casas en plantas bajas pensando que sería como tantas otras veces, y esas casas han sido completamente arrasadas», lamenta. Apunta el presidente de SOS Desaparecidos que «se cerraron colegios y universidades pero se permitió que los coches circularan por las carreteras, donde muchos quedaron atrapados causando muertes».
Asegura Joaquín Amills que lo que ocurrió es que «se ha esperado a que alguien dé el visto bueno a las medidas, pero en Emergencias no hay que esperar ningún visto bueno, es A-B-C y hay que cumplir, y si mandas una alerta y lueog no pasa nada, bendito sea». En este sentido, recuerda que en la dana de Andalucía, pocos días más tarde, sí se alertó y se tomaron medidas como el cierre de colegios, de empresas en las zonas inundables y restricciones al tráfico y «no pasó lo que pasó en Valencia».
Gratis para las familias
Adherirse a la querella será «completamente gratis» para las familias que así lo decidan, ha destacado asimismo Amills, incluso en el caso de que se pierda y haya que hacer frente al pago de costas. «No somos mercaderes del dolor ni esto es un negocio, lo que estamos haciendo es buscándonos mucho trabajo, pero es justo que lo hagamos», considera. «Es inmoral que, ante 222 muertos y cuatro desaparecidos, nadie reconozca un error, que nadie derrame una lágrima y solo busquen echarse la culpa unos a otros, ¿cómo pueden mirar a los ojos a los familiares?», añade.
Por eso, desde la asociación han armado ya un equipo de profesionales que se encargará de la presentación de la querella. Está formado, explica el presidente de la organización, por tres abogados y tres expertos en emergencias que trabajan con SOS Desaparecidos. Uno de ellos es experto en búsquedas y dos especialistas técnicos en emergencias y peritos judiciales.