El humorista Héctor de Miguel, conocido como Quequé, ha dicho ante el juez que le investiga por un presunto delito de odio por sugerir que habría que dinamitar el Valle de los Caídos, que estaba bromeando «exclusivamente con su público» cuando dijo estas palabras en su programa radiofónico, según han informado fuentes jurídicas presentes en su declaración.
De Miguel ha declarado este jueves como consecuencia de la querella que interpuso el colectivo Abogados Cristianos, que considera que el cómico incurrió en un delito de provocación a la discriminación, al odio y a la violencia (del artículo 510.1 del Código Penal) cuando animó en la Cadena Ser a -según su denuncia- «dinamitar el Valle de los Caídos y apedrear a sacerdotes pederastas a las puertas de iglesias y monasterios».
Quequé ha rechazado contestar las preguntas de los denunciantes y tan solo ha contestado a las del juez y a las de su letrado.
Al término de la declaración la presidenta de Abogados Cristianos, la letrada Polonia Castellanos, ha dicho que «las afirmaciones que hizo son muy agresivas, no pueden ampararse absolutamente en nada», y ha confiado en que «haya una sentencia condenatoria».
Castellanos ha afirmado que el humorista ha mantenido que «Quequé y Héctor de Miguel son dos personas diferentes», y que su broma sobre el Valle de los Caídos, denominado actualmente de Cuelgamuros, iba dirigida «exclusivamente a su público«, lo que los denunciantes no comparten.
La presidenta de Abogados Cristianos ha considerado que ha sido una declaración «carente de valentía», ya que el humorista hizo un llamamiento público para que sus oyentes la acosaran a ella, pero hoy «no se ha atrevido a contestar» a sus preguntas como letrada «porque soy una mujer».
«Muy lejos de disculparse, insiste en su mensaje de odio«, ha concluido la presidenta del colectivo católico.