El actor Alfredo Casero recibió el alta médica ayer por la tarde tras haberse sometido a un reemplazo de cadera en la clínica San Camilo y luego de pasar por una preocupante internación explicó que deberá iniciar el proceso de recuperación.
En principio, el intérprete señaló que se encuentra: “Tratando, en lo posible, de empezar una rehabilitación de la cadera porque no me morí”. A pesar de la preocupación de su entorno, Casero llevó tranquilidad a su público ya que se suponía que la cirugía habría sido de urgencia.
“Era algo que estaba programado. Como nunca digo nada y vinimos a las seis de la mañana, quedó como que era algo de urgencia, pero no podía ser porque era un reemplazo de cadera”, sostuvo el artista.
Además, Alfredo subrayó que el alta “se pospuso porque en San Camilo te tienen así -con máximos cuidados-, no te dejan hasta que no tienen lo que quieren y la verdad es que estuve muy bien atendido”.
En cuanto a los dolores explicó: “Ahora tengo un parche de morfini -morfina-, pero ya está todo muy bien, es algo muy leve. Estoy bárbaro, me queda recuperarme y volver al polo con bolitas, a las bolitas a caballo”.
El actor pospuso la cirugía para no interrumpir las funciones de su espectáculo “Cha, Cha, Cha” y, al respecto, explicó: “No pudimos terminarla en marzo porque no podía más y mis productores me dijeron que cortemos. Yo dije que ‘ni en pedo, me opero y en abril hago la que queda’, porque quedó mucha gente que iba a venir, son nueve shows».
El intérprete pasaría parte del tiempo de recuperación en la casa de una de sus hijas: “Me quedo cuatro días acá y después me voy a Capilla del Señor -su casa- que tengo que juntarme con mis perros, lo necesito”.
En cuanto a su espectáculo, el artista afirmó: “Volvemos a empezar el 12 o 15 de abril. No lo puedo dejar, iba con muletas, estaba muy angustiado porque me tenía que operar”.
“Quedense tranquilos que sigo rompiendo las b*las y haciéndolos reír”, concluyó. (NA)