El domingo 9 de febrero, un acto heroico de la Policía de Córdoba permitió salvar la vida de un bebé de un año que se atragantó con un trozo de comida mientras estaba con su familia en el Río Candonga, en la localidad de Río Ceballos.
La tarde se tornó angustiante cuando la madre del pequeño, Alicia, al ver que su hijo Mateo comenzaba a ahogarse, acudió desesperada a la comisaría de El Manzano. Al llegar, la sargento Iris González no dudó ni un segundo y, con gran rapidez y profesionalismo, realizó las maniobras de primeros auxilios necesarias para despejar las vías respiratorias del niño.
En ese preciso momento, el oficial subinspector Lautaro Capitanelli y el cabo Cristian Quinteros se unieron al esfuerzo. Con eficacia, trasladaron al pequeño hacia un hospital local, donde los médicos continuaron con la atención y estabilización del bebé.
Gracias a la rápida reacción de la madre, la intervención oportuna de los efectivos y la pronta atención médica, el niño pudo recuperarse completamente de la emergencia.
La familia expresó su profundo agradecimiento a los tres agentes, quienes se destacaron por su valentía, dedicación y compromiso en un momento tan crítico. La historia fue un claro ejemplo de cómo la preparación y la rapidez en la acción pueden marcar la diferencia en situaciones de vida o muerte.