Trump defiende a su equipo militar y de seguridad nacional pese al escándalo del chat en Signal

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, trata de contener el escándalo provocado desde que el lunes se supo que destacados miembros de su gabinete y del equipo militar y de seguridad nacional usaron un chat en la aplicación comercial de mensajería Signal para abordar los planes de ataque a objetivos hutíes en Yemen, conversación en la que se incluyó al periodista y director de ‘The Atlantic’, Jeffrey Goldberg.

La táctica elegida por el republicano y su gobierno ha sido la de minimizar la importancia de lo sucedido, pese a su gravedad. En una entrevista con NBC este martes Trump ha asegurado que se trató solo de un “fallo” y ha dicho que “ha resultado no ser grave”. 

Se trata de una afirmación cuestionable dado que en el chat de Signal, una aplicación que encripta las conversaciones pero que se tiene en aparatos que pueden ser vulnerables, se dieron detalles como el momento en que se iban a producir los ataques, los objetivos específicos o el armamento que se iba a emplear. Eso pudo poner en peligro la seguridad nacional e incluso representar una violación de la Ley de Espionaje, que gobierna cómo se debe manejar la información de seguridad nacional, que se debe mover en canales seguros y protegidos.

Increíble línea de defensa

La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, además de optar por la vía de tratar de atacar a Goldberg insultándolo como “sensacionalista”, ha realizado la increíble defensa de que “no se envió material clasificado” y “no se discutieron planes de guerra”. Es el mismo argumento que han mantenido en una vista en el Senado la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, y el de la CIA, John Radcliffe.

Ellos participaron en un chat donde también estaban el vicepresidente J.D. Vance; el secretario de Defensa, Pete Hegseth; el de Estado, Marco Rubio; la jefa de gabinete de Trump, Susie Wiles, asesores como Stephen Miller y el asesor de Seguridad Nacional, Mike Waltz. Fue este último quien invitó a Goldberg a sumarse al grupo de Signal y este martes ha sido defendido por Trump en sus declaraciones a la NBC. “Ha aprendido la lección y es un buen hombre”, ha dicho el presidente.

«Chapucero, descuidado, incompetente»

Para los demócratas lo sucedido ha abierto una vía de ataque a Trump. En la vista en el comité de inteligencia, que se había organizado previamente a la filtración del lunes y que iba a estar centrada en las principales amenazas para la seguridad nacional, el senador Mark Warner ha tildado el episodio como una muestra del “comportamiento chapucero, descuidado e incompetente” de los principales cargos de inteligencia y seguridad nacional del gobierno del republicano. Algunos de sus colegas han pedido las dimisiones de Hegseth y de Waltz.

Incluso algunos políticos del partido de Trump asumen la gravedad del error y se han atrevido a decir que el gobierno no debería negar que se compartió información clasificada. “Es un disparate. Deberían ser honestos y reconocerlo”, ha recomendado a la Casa Blanca Don Bacon, un congresista republicano de Nebraska que forma parte del comité de Servicios Armados de la Cámara Baja. Bacon también ha dicho que su propio partido debe ser crítico y que Hegseth, el secretario de Defensa, debería “responder” por lo sucedido.

El senador Lindsey Graham, mientras, ha reconocido que se produjo un “error” y ha dicho que se ha “esquivado una bala”. “Espero que entendamos lo que pasó para que no se vuelva a producir”.

El servidor de Clinton

Aunque la Administración de Trump trate de frenar el impacto del episodio es uno que le saca los colores, más aun cuando muchos republicanos, incluyendo personas ahora en el gabinete de Trump como Hegseth y Rubio, fueron extremadamente críticos con Hillary Clinton cuando era la candidata presidencial demócrata en 2016 y se supo que había usado un servidor de correo electrónico privado como secretaria de Estado de Barack Obama. En aquella campaña el uso del servidor privado y el borrado de e-mails alimentaron los cánticos en los mítines de Trump llamando a encarcelar a la demócrata.

“Cualquier profesional de la seguridad, sea militar, del gobierno o de otro tipo, sería inmediatamente despedido por este tipo de conducta y perseguido por lo penal por ser tan temerario con este tipo de información”, dijo el ahora jefe del Pentágono cuando era presentador en Fox News.

También Miller fue durísimo con Clinton. “Enemigos extranjeros podrían fácilmente conseguir mediante pirateo información clasificada de operaciones e inteligencia desde el otro lado del globo”, denunció entonces.

La propia Clinton ha compartido en X el artículo de ‘The Atlantic’ junto a un emoticono de dos ojos abiertos y una frase: “Tienes que estar de broma”.

Más Noticias

Noticias
Relacionadas

Tarot del colibrí para el 26 de marzo

Carta 1) La esperanza: fe....

Todo pasa Cómo devolverle la sonrisa al rey?

Hubo un tiempo en el que sobraba el...

«Existen dos tiempos que no rivalizan: el del juego y el de la literatura»

Alejandro Zambra (Santiago de Chile, 1975) espera sentado en la...

Bialet Massé: construyen nuevas alcantarillas y relocalizan cañerías de agua

Bialet Massé. Luego de las...