La compota de manzana es un postre saludable, fácil de preparar y perfecto para acompañar desayunos, postres o disfrutar sola. Es una excelente opción para niños y adultos, ya que es natural y sin conservantes.
Ingredientes
4 manzanas (rojas o verdes, según tu preferencia)
250 ml de agua
50 g de azúcar (opcional, según el dulzor de las manzanas)
1 cucharadita de jugo de limón
1 rama de canela o 1 cucharadita de canela en polvo (opcional)
1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
Paso a Paso
1. Preparar las manzanas
Lava, pela y corta las manzanas en cubos medianos, retirando el corazón y las semillas.
Coloca los trozos en una olla y agrega el jugo de limón para evitar que se oxiden.
2. Cocinar la compota
Añade el agua, el azúcar (si decides usarlo) y la canela a la olla.
Cocina a fuego medio durante 15-20 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que las manzanas estén tiernas.
Si deseas una textura más suave, tritura la mezcla con un tenedor o una batidora hasta obtener la consistencia deseada.
3. Servir y conservar
Agrega la esencia de vainilla (opcional) y mezcla bien.
Deja enfriar y guárdala en un frasco hermético en la heladera por hasta 5 días.
Consejos
Si prefieres una compota sin azúcar, elige manzanas dulces como las Fuji o Gala.
Puedes añadir un toque de miel o edulcorante natural para endulzar sin azúcar refinada.
Para una versión aún más aromática, prueba agregar clavo de olor o jengibre rallado.