La fuerza aérea de Israel llevó a cabo intensos bombardeos el viernes en el sur del Líbano, en lo que el ejército israelí afirmó eran ataques dirigidos contra instalaciones subterráneas del grupo militante Hezbolá.
La Agencia Nacional de Noticias, gestionada por el Estado, informó que los bombardeos se produjeron en dos oleadas sobre las montañas que dominan Nabatieh, y que se utilizaron bombas antibúnker. No se informó de víctimas.
Desde que terminó la guerra de 14 meses entre Israel y Hezbolá en noviembre, Israel ha realizado bombardeos casi diarios en el sur del Líbano, aunque los ataques del viernes fueron más intensos de lo habitual.
El ejército israelí indicó en un comunicado que sus aviones de combate atacaron un sitio utilizado por Hezbolá para gestionar su sistema de fuego y defensa en la zona.
Agregó que el lugar formaba parte de un importante proyecto subterráneo que quedó completamente fuera de uso tras los ataques del viernes.
El ejército también señaló que había identificado intentos previos de Hezbolá por rehabilitar la zona, y por ello atacó infraestructuras en el área.
Hezbolá no hizo comentarios de inmediato.
Durante la guerra, Hezbolá sufrió fuertes golpes y pérdidas significativas, hasta que un alto el fuego negociado por Estados Unidos en noviembre puso fin a los combates.
La guerra entre Hezbolá e Israel dejó más de 4,000 muertos en el Líbano y provocó daños estimados en 11 mil millones de dólares.
En Israel, murieron 127 personas, incluidos 80 soldados.
Como parte del acuerdo de alto el fuego, Hezbolá fue obligado a retirarse de las zonas fronterizas con Israel en el sur del Líbano y no puede tener presencia armada al sur del río Litani.
Los bombardeos del viernes ocurrieron al norte del río Litani.