Jair Bolsonaro le ganaría al dictador Lula da Silva si hoy fueran las elecciones

En medio de la persecución política en Brasil, una reciente encuesta de AtlasIntel en colaboración con Bloomberg reveló, al igual que otros sondeos, que el expresidente Jair Bolsonaro sigue siendo el principal rival del dictador Luiz Inácio Lula da Silva, y si las elecciones presidenciales fueran hoy, le ganaría.

Este dato representa una amenaza directa al poder de Lula, quien no ha ocultado su intención de eliminar políticamente a su principal adversario mediante el impulso de causas penales falsas y su intención de proscribirlo.

Según la medición publicada el martes 8 de julio, correspondiente al estudio Latam Pulse Brasil del mes de junio, Bolsonaro obtendría un 48,6% de los votos frente al 47,8% de Lula, una diferencia de 0,8 puntos porcentuales.

| La Derecha Diario

De esta manera, la encuesta revela que Bolsonaro es el único que puede vencer a Lula en las urnas. Ningún otro dirigente opositor, ni Tarcísio de Freitas, ni Michelle Bolsonaro, ni Romeu Zema, ni Ratinho Jr, logra superarlo en un escenario de balotaje.

Este escenario electoral, cada vez más nítido, coincide con una intensa ofensiva judicial y mediática contra Jair Bolsonaro impulsada por el propio dictador socialista Lula. Desde su regreso al poder, el líder del Partido de los Trabajadores ha emprendido una sistemática persecución política contra el exmandatario, buscando proscribirlo, inhabilitarlo o directamente encarcelarlo bajo acusaciones infundadas, en colaboración con la Corte Suprema de Brasil, controlada por Lula.

Las cifras de AtlasIntel, considerada la encuestadora más precisa en las últimas tres elecciones brasileñas, también muestran que Bolsonaro lidera en un escenario de primera vuelta, con una ventaja de 1,6 puntos sobre Lula. La encuesta se basó en 2.621 entrevistas realizadas entre el 27 y el 30 de junio.

| La Derecha Diario

Frente a este panorama, la dictadura brasileña ha intensificado sus esfuerzos por atacar judicialmente al expresidente. Las causas penales falsas buscan consolidar un escenario de proscripción que impida a Bolsonaro competir en 2026. Lula, cada vez más debilitado en las encuestas, parece no estar dispuesto a enfrentar nuevamente al líder de derecha en una elección democrática.

La estrategia es clara: eliminar al adversario más competitivo por vías no electorales. La presión judicial contra Bolsonaro es vista por amplios sectores de la sociedad brasileña como una maniobra autoritaria propia de un gobierno que no confía en la voluntad del pueblo.

Más Noticias

Noticias
Relacionadas