Empezó sin hacer excesivo ruido, pero se ha ido consolidando en el ámbito cultural veraniego como demuestra el haber cumplido su décimo aniversario. El festival Al Fresco volvió a congregar a un público cuantioso en sus dos noches de puesta en escena, de música y de un ambiente que se muestra como otro de los reclamos del festival. Es uno de los fines de semana que ya están marcados en el calendario cultural de Los Pedroches.
Y precisamente con música de la tierra abrió el festival ya que el primer artista en pisar el escenario fue el pozoalbense Sr. Olmo, que se encontró con un público al que presentó sus nuevos temas y con el que recordó otros de su amplio bagaje musical. Luego se abrió paso el electrolatino de Cosmic Wacho, un dúo que puso a bailar al público con su fusión de cumbia o bachata con pop, funk y electrónica.
Un momento de la actuación de la banda madrileña Camellos. / RAFA SÁNCHEZ
El cierre de la noche del viernes lo echó la banda madrileña Camellos que ofreció sus himnos urbanos en Pozoblanco antes de pasar por citas como el Sonorama o la sala La Riviera.
El sábado ha sido de Shego y Biznaga, las grandes apuestas de una noche donde el público ha vuelto a responder y disfrutar del estilo desenfadado y fresco de las primeras y de la descarga de punk cargado de crítica social, guitarras afiladas y una puesta en escena potente de la segunda banda. Abrieron la noche el quinteto Olímpica y los barceloneses The Excitements.