Un niño de once años que fue evacuado el pasado domingo tras perder el conocimiento cuando se encontraba en las piscinas municipales de El Fango, en el barrio bilbaíno de Rekalde, ha fallecido este miércoles tras permanecer tres días en la UCI del Hospital de Cruces.
Aunque no se han confirmado las causas del fallecimiento, el suceso se produjo sobre las cuatro de la tarde, en plena ola de calor con temperaturas de unos 35 grados, cuando el niño acababa de salir de la piscina, donde también tuvieron que ser atendidos otros usuarios afectados por síntomas de golpes de calor.
El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, ha lamentado en las redes sociales el fallecimiento del niño, que formaba parte de un grupo de menores que habían viajado de vacaciones a Bilbao junto a los monitores de una parroquia valenciana.
«Triste noticia. Ha fallecido el niño que vino de Valencia y estaba en El Fango cuando se indispuso. Lo sentimos mucho. Por él, su familia y su colectividad. La vida es, a veces, muy injusta. Y más si se corta de raíz a una edad tan temprana. Una tragedia», ha publicado Aburto.