Carli Bianco: Milei no puede sentarse con Kicillof porque le tiene miedo

“El pueblo bonaerense le dijo ‘no a Milei, no a sus políticas, no a su crueldad, no a la motosierra, no al ajuste’”, sostuvo el ministro de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, Carlos Bianco, en Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (AM 1190). Para el funcionario, el resultado electoral en la provincia fue “un doble plebiscito: uno sobre el gobierno nacional, que salió muy mal, y otro sobre el gobierno provincial, que fue revalidado por la gente”.

Carlos Bianco es político y economista argentino. Actualmente se desempeña como ministro de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, designado en diciembre de 2023 por el gobernador bonaerense Axel Kicillof. Anteriormente fue jefe de Gabinete de Ministros de la provincia de Buenos Aires y jefe de Asesores del gobernador.

¿Qué fue exactamente lo que pasó este domingo en la provincia de Buenos Aires?

Esto no les gusta a los autoritarios

El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.

Creo que no hay que buscarle mucha vuelta. Me parece que es muy simple entenderlo. Me parece que el pueblo bonaerense le dijo: “No a Milei, no a sus políticas, no a su crueldad, no a la motosierra, no al ajuste”. Y, por el contrario, revalidó lo que está haciendo el gobierno de la provincia de Buenos Aires, lo que están haciendo los intendentes en la provincia de Buenos Aires: cuidar a su población, cuidar su empleo, cuidar su salud, cuidar su educación, continuar con la obra pública en una provincia donde hay tantas necesidades. Me parece que se tiene que entender en esos términos. Fue un doble plebiscito. Un plebiscito sobre el gobierno nacional, que le dio muy mal, y un plebiscito sobre el gobierno provincial, que nos dijeron: “Bueno, este es el camino, más allá de las dificultades hay que continuar trabajando en este sendero”.

Preguntaba qué pasó, para tratar de entender si lo que pasó es la nacionalización de una política, una especie de plebiscito. Entonces uno podría inferir que en octubre el resultado tendría que ser similar. ¿Es correcto esta apreciación?

Creo que es un poco prematuro. Lo que yo digo es que se ha dejado una base de votos muy alta para octubre, para el peronismo. Y creo que esa es una de las virtudes que ha tenido este desdoblamiento: al ganar con tanta comodidad esta elección, ha quedado una base muy sólida para encarar la próxima elección, que ya es una elección nacional. No es una elección de la provincia de Buenos Aires, es una elección nacional donde se eligen diputados nacionales en todo el país. Pero creo que en la provincia de Buenos Aires hemos dado una muestra muy fuerte de trabajo, de convicciones, de determinar un rumbo a seguir para mejorarle la vida a los bonaerenses. Y eso es positivo. Es positivo en vistas de lo que va a pasar en octubre.

Carrió apuntó contra Javier y Karina Milei: «Son una pareja perversa»

Había toda una discusión en su momento respecto de que las elecciones de septiembre condicionaban las de octubre. Diferencias, incluso, desde la expresidenta Cristina Kirchner, el presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, planteando que si se perdía en septiembre o las elecciones de septiembre no salían muy bien, esto repercutía sobre octubre. Hoy se ve claramente que fue un acierto para el oficialismo bonaerense haber desdoblado las elecciones. ¿Es correcta aquella? O sea, ¿hay un efecto de septiembre sobre octubre, lo que se llama el carro del vencedor que empuja la tendencia hacia octubre?

Nosotros siempre decíamos una frase internamente, que era que “sin septiembre no hay octubre” y que, por lo tanto, lo primero que había que hacer era asegurar la victoria en septiembre. Y para eso nosotros creíamos que la mejor estrategia electoral era el desdoblamiento, porque nos iba a permitir justamente poner en discusión muchas de las cosas que se hicieron en la provincia de Buenos Aires. Se iba a poner en contraste, sobre todo, porque creo que lo determinante es el contraste, más allá de lo que nosotros hicimos, cuando uno contrastaba con lo que no había hecho el gobierno nacional, la diferencia era muy fuerte.

Cuando vos hablabas de lo que hicimos nosotros en educación, con la construcción de 285 edificios escolares nuevos; cuando hablamos en salud, con la construcción de 199 centros de atención primaria de la salud; cuando hablamos de educación universitaria, que nosotros construimos 44 centros universitarios nuevos en el interior de la provincia; cuando hablás de seguridad, que nosotros compramos 7.500 patrulleros nuevos; y uno miraba lo que hacía el gobierno nacional, era solamente recortar las partidas de educación, de salud, de seguridad en la provincia.

De hecho, muchos periodistas nos preguntan: “Bueno, ¿cómo hacen?”. Bueno, con mucho esfuerzo, con mucha disciplina, con mucha creatividad lo hemos logrado. Así que yo lo que creo es que no es que una cosa está atada con la otra necesariamente, pero sí que están vinculadas. Un buen resultado en septiembre deja una posición política más cómoda para encarar la campaña de octubre. Bueno, ahora será una cuestión de también tener eficacia en la campaña de octubre.

El FMI salió a respaldar al Gobierno de Milei tras la derrota en la provincia de Buenos Aires

Mi pregunta es, y va al plano nacional: vos me hablás, lógicamente, de los logros en la provincia de Buenos Aires, y yo te llevo continuamente a cuánto de esto es un plebiscito nacional, cuánto de esta elección local, de alguna manera, anticipa octubre y cuánto del voto fue de crítica al gobierno nacional independientemente del apoyo al gobierno provincial. Y cuánto hay, independientemente del triunfo del gobernador por lo hecho en la provincia, de nacional, en el sentido de colocarlo como presidenciable para 2027. Te pido una reflexión saliendo de la provincia de Buenos Aires y tomando lo que pasó en la provincia de Buenos Aires a nivel nacional.

Vuelvo a lo que dije al principio. Yo creo que es un doble plebiscito en la provincia de Buenos Aires, que es el 40% además del electorado. Un plebiscito sobre el gobierno nacional, en donde claramente la voz de los bonaerenses ha dicho que no está de acuerdo con estas políticas y con estas formas de hacer política: la agresión, la crueldad, agarrárselas con los sectores más vulnerables, los discapacitados, los jubilados, etcétera. El pueblo bonaerense claramente dijo: “No, esto no nos gusta”. Y, al mismo tiempo, revalidar un camino que se está llevando en la provincia de Buenos Aires hace casi seis años. Después, la proyección del resultado a la elección nacional, al ámbito nacional, y analizar si el gobernador queda parado como presidenciable me parece que es una segunda cuestión que se tendrá que discutir más adelante.

Nosotros lo que siempre dijimos es que la provincia de Buenos Aires era el principal núcleo de oposición en Argentina al gobierno nacional, quien contrastaba mucho más fuerte con sus medidas, con sus políticas, con lo que en realidad no hacía el gobierno nacional. Y que, por lo tanto, desde la provincia de Buenos Aires había que crear una alternativa, una esperanza para 2027. Yo creo que, efectivamente, el domingo empezó esa esperanza. No es una esperanza que tiene un nombre y un apellido de una persona, es una esperanza que tiene, como dijo el gobernador sobre el final de su discurso, tres componentes: democracia, paz y peronismo.

Se anunció hace minutos que volvemos a tener Ministerio de Interior, que lo que era la Secretaría de Interior ahora pasa a ser Ministerio de Interior. Y Kicillof reclamó sostenidamente ser recibido por el presidente. Intuyo que es algo que nunca el presidente hasta ahora ha hecho: proponerle esa reunión. Si la reunión fuera propuesta por el nuevo ministro del Interior, ¿estaría cumplida la expectativa de Kicillof o solo si lo recibe el presidente?

Dos cosas. Yo creo que al presidente le falta valentía para sentarse con el gobernador. Probablemente le tenga miedo al gobernador, el presidente, porque no le podría sostener ninguna discusión, no lo podría mirar a los ojos y explicarle por qué le robó todo lo que le robó a los bonaerenses, por qué le quitó tantos recursos al gobierno de la provincia de Buenos Aires sabiendo que hay tantas necesidades. O sea, que me parece un signo de cobardía que el presidente no se pueda sentar en una mesa con un gobernador. Me parece un símbolo de cobardía. Por un lado. Por el otro, siempre que nos convoquen nosotros vamos a participar.

De hecho, yo me junté muchas veces con el jefe de Gabinete de Ministros porque le solicité las reuniones. Bueno, que tenían que ver con el reclamo de nuestras obras públicas, de nuestro presupuesto. También, cuando estábamos empezando a organizar el proceso electoral. Y también me reuní varias veces con Lisandro Catalán, que entiendo que es quien ahora ha sido nombrado ministro del Interior y con quien tenemos una buena relación, una relación de trabajo. A veces han podido dar respuesta a algunos de los reclamos que nosotros hicimos, otras veces no, pero yo, en particular, celebro que ahora haya un ámbito muy, muy claro en donde poder tener un diálogo las provincias con el gobierno nacional. Que es lo normal.

RM/ff

Más Noticias

Noticias
Relacionadas

Córdoba: bajo «riesgo extremo de incendios», contienen ocho focos en la provincia

Con ráfagas de viento sur de sesenta kilómetros por...

Combaten un incendio forestal cerca de Unquillo

Unquillo. Un incendio forestal se...